Se trata de una terapia de sonidos con el objetivo de mejorar la discriminación auditiva y el lenguaje, tanto hablado, como escrito. Desarrollada por Kjeld Johansen, Director del Baltic Dyslexia Research Laboratory, En qué consiste: A partir de una audiometría y otros tests auditivos se graban unos CD’s personalizados que el cliente escucha en su casa 10 minutos al día, entre 8 y 12 semanas. Cada 2-3 meses se vuelve a revisar la audición y se graba un nuevo CD. La duración total es de 12-18 meses.
A medida que se normaliza la escucha, mejoran también la escritura, el lenguaje e incluso el comportamiento.
Aplicable a los siguientes signos de dificultades auditivas:
- Estar “en las nubes” en clase.
- Dificultades para entender lo que se dice cuando hay ruido de fondo.
- Dificultades para seguir instrucciones orales
(comprobando lo que hacen los compañeros). - Tener problemas para para ignorar la información sensorial no relevante.
- Confusión o inversión de letras.
- Mala comprensión lectora.
- Tardar más tiempo del necesario en completar una ficha o los deberes.
- Conducta disruptiva (a causa de lapsos cortos de atención).
- No siempre responder cuando se le llama por su
nombre. - Hipersensibilidad o disgusto por algunos sonidos en particular.
- Habla vacilante, o mal articulada.
- Entonación plana, monótona.
- Decir ¿qué? o ¿eh? varias veces al día.